Coincidiendo con las movilizaciones de médicos en la Comunidad de Madrid se han podido leer durante estos días titulares parecidos a este: “Los usuarios de las redes sociales salen en defensa de la sanidad pública en España”. Esos usuarios consiguieron colocar la etiqueta #graciasalasanidadpublica como “Trending Topic” (tema del día) en twitter, que es una de las redes sociales con mayor número de usuarios. Miles de usuarios de twitter escribieron sus mensajes al amparo de esa etiqueta movidos por la consigna de que el gobierno del PP va a privatizar la sanidad que es, más o menos, lo que el PSOE y resto de partidos de izquierda está propagando. No niego que muchos de esos usuarios, con el aliciente que supone convertirse en líder de opinión sin moverse del salón de casa, mandaran esos mensajes de forma totalmente apolítica y convencidos de que enviándolos estaban contribuyendo a una buena causa. Porque ¿quién no quiere una sanidad pública? ¿quién no se defendería ante un ataque de tamañas proporciones?

Lo que ocurre es que los que tenemos memoria nos sorprendemos de que esas movilizaciones, en twitter y en la calle, no se hubieran producido antes y ante los verdaderos responsables de la actual situación. Ante el verdadero ataque que sufrió la sanidad española y el conjunto del país. Parece que ya se nos ha olvidado que el PSOE dejó una deuda de 16.000 millones de euros en sanidad con graves impagos a proveedores que hacían peligrar el sistema.  El Gobierno de Rajoy tuvo que actuar para evitar el colapso y la quiebra del sistema sanitario y aún así no ha impuesto el copago sanitario, como hubiera hecho el PSOE en el caso de seguir gobernando. Se ha frenado el despilfarro farmacéutico con ajustes equitativos en el tema del copago de medicamentos cuyo grado de aportación se establece en función de tres criterios: renta, edad y grado de enfermedad. No pagan nada los que perciban pensiones no contributivas y por primera vez en la historia los parados de larga duración no tendrán que pagar nada por las medicinas, mientras que con el social y progresista gobierno de ZP pagaban un porcentaje de las mismas.

En Castilla-La Mancha la deuda sanitaria ascendía a 7.000 millones de euros y se proyectaban edificios y sedes salidos de la mente megalómana de algún iluminado que no dudaba en instalar en su despacho pantallas de plasma de 9000 euros. Todo esto y más, obligó al gobierno de Cospedal a elaborar un Plan de Garantía de los Servicios Sociales Básicos para blindar los servicios sanitarios y sociales. Gracias a este plan hoy los profesionales de la sanidad pueden cobrar sus nóminas, en algunos casos con conceptos impagados desde 2010. Por todo lo que he referido anteriormente considero que esa etiqueta que ha sido “trending topic” es injusta y llega tarde. Los usuarios de las redes sociales deberían haber reaccionado cuando hace sólo un año había un peligro cierto de cerrar hospitales en España y de que los funcionarios de la sanidad hubiesen dejado de cobrar sus nóminas. Por eso desconfío de la “espontaneidad” de este tipo de mensajes.

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Written by Miguel Angel Rodríguez
He sido muchas cosas, ahora solo un ciudadano de a pie que expresa su opinión sobre los asuntos de su interés, que son variados. Si no os gusta lo que leéis podéis seguir circulando. Sin acritud. Per aspera ad astra.