Tras agosto, mes inhábil a efectos de artículos de opinión en La Tribuna, volvemos a la rutina septembrina. Al tratarse de un artículo de temática política parece no haber pasado el tiempo y podría empezar tranquilamente con el famoso “decíamos ayer…” con el que Fray Luis de León reanudó sus clases en la Universidad de Salamanca tras el largo proceso inquisitorial que lo mantuvo apartado de su cátedra durante cinco años. Fray Luis quería hacer desaparecer los cinco años de prisión, como si nada hubiese cambiado en ese lustro. Y algo así sucede en el ámbito político. Si hablamos de lo local podría empezar tranquilamente este artículo con esas dos palabras, porque todo sigue igual que tras el periodo vacacional. Pareciera como si el Ayuntamiento hubiese estado cerrado por vacaciones y al abrir de nuevo sus puertas nos encontramos con los mismos problemas que hace dos meses pero agravados por la inacción. El último artículo publicado sirve, si le cambiamos la fecha de julio por la de septiembre. La suciedad que sigue campando a sus anchas no solo en los barrios periféricos, sino en el centro mismo de la ciudad. Los parques públicos, antaño embajadores ante el mundo de nuestra señera calidad de vida, están secos y descuidados. Las zonas verdes que han dejado de serlo. Los brotes de legionela de los que a día de hoy no tenemos información documental de los mismos. Más allá de una información en un pasillo por parte de la alcaldesa con mayúscula, este Grupo Municipal no ha tenido acceso a los informes microbiológicos de los mismos, con lo que la tan cacareada transparencia que predica el equipo de Gobierno se queda en pose y toreo de salón. La televisión municipal sigue apagada. Un medio de comunicación que servía a los intereses de los vecinos de Ciudad Real retransmitiendo eventos importantes para la ciudad. Me dicen que la alcaldesa con mayúscula ha dado orden de ponerla en marcha para atizar su autobombo y mejorar su depauperada imagen y la de su ineficaz equipo de Gobierno. Por desgracia el apagón solo habrá servido para despedir a los profesionales que venían prestando servicio en ella. ¿O quizá el apagón fue solo para eso?
El tema de las remunicipalizaciones sigue en el aire. Aquí el “decíamos ayer” es más claro porque es un tema del que se viene hablando desde el inicio de la legislatura. Como pueden ver, temas abiertos de los que seguiremos hablando en septiembre. Bueno, una cosa ha cambiado. Mientras que cuando gobernaba el PP esta ciudad, los gobiernos socialistas de la Junta y de España ponían palos en la rueda de nuestro desarrollo y se llevaban las inversiones a otros municipios, el Gobierno de Rajoy sin mirar el color político, ha pagado casi nueve millones de euros al Ayuntamiento de Ciudad Real en concepto de IBI. Sin duda por las gestiones de años atrás de los políticos implicados en el caso, pero también fruto del trabajo callado de algunos funcionarios municipales que se la jugaron en varias ocasiones para hacer posible eso cobro de hoy y a los que un ufano concejal de Hacienda, que en el pasado pedía que le perdonásemos esa deuda al hospital, no ha sido capaz de dar las gracias. Nombres como el de Enrique, Román, Manuel…han hecho posible este desenlace. Gracias. Pero es que si pasamos al ámbito autonómico la situación es similar. Un gobierno de García-Page en manos de PODEMOS cuyos recortes han puesto en riesgo la sanidad y la educación de Castilla-La Mancha. Podemos decir sin temor a equivocarnos que, a día de hoy, la sanidad y la educación están peor que hace un año. La gestión de García-Page está siendo blanco de críticas desde todos los sectores implicados en esas materias y mucho nos tememos que harán un daño irreparable en la sociedad. Nos fuimos de estas páginas en julio hablando de cierre de camas, listas de espera y recortes en sanidad, de incumplimientos en educación, falta de medios y menos profesores que el año pasado y volvemos en septiembre igual. Y mientras Ganemos/Podemos tanto en el Ayuntamiento como en la Junta apesebrados y a verlas venir, haciendo seguidismo de un PSOE cada vez más desnortado y alejado de los intereses de los vecinos.
Leave a Comment