Ya es casualidad que el primer acto importante de precampaña del nuevo partido o coalición izquierdista “Unidos Podemos”, tuviera que ser en Ciudad Real. Fue el 31 de mayo y decidieron celebrar el Día de la Región por su cuenta. Y para más INRI eligieron la plaza de la Constitución, junto a esa Excelentísima Diputación Provincial de Ciudad Real que quieren abolir. Esa sola no, quieren abolirlas todas, y en esto coinciden con Ciudadanos, otra casualidad. Lo de “Unidos Podemos” viene, básicamente, de la unión de la vetusta Izquierda Unida con los mozalbetes de PODEMOS. Unos chavales, aunque algunos ya no tanto, que se afanaban en decir que ellos eran nuevos, como surgidos de la nada, y que no tenían nada que ver con el comunismo, eso tan viejo. Pero claro, dicen que no son comunistas y resulta que en el acto del 31 de mayo en Ciudad Real había profusión de banderas comunistas, esas terribles de la hoz y el martillo, y también de las tricolores de la II República. Y aunque desde su departamento de comunicación se afanaron en llamar a los medios nacionales para que no se vieran, y pese a las instrucciones dadas a sus sedes locales para que no aparecieran, pese a todo eso, toda España pudo ver que en realidad son lo que son, comunistas. Niños bien, pero comunistas. Quizá lo son porque no han pasado penurias y pueden mandar sus consignas anti-imperialistas desde su Iphone o su Ipad, o desde ambos a la vez. Porque la democracia que tanto costó consolidar en España permite que haya partidos como el comunista que sustentan regímenes liberticidas en muchas partes del mundo todavía, aunque por fortuna cada vez menos.