El pasado miércoles el Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha presentó en el registro de la Cámara su propuesta de modificación del Reglamento de la misma. A grandes rasgos viene a significar que a partir del 1 de enero los parlamentarios regionales dejarán de cobrar un sueldo fijo y empezarán a cobrar por asistencia a plenos y comisiones. Esta medida ya fue anunciada por la presidenta Cospedal en el pasado debate sobre el estado de la región y hay que decir que fue muy bien acogida por la práctica totalidad de los ciudadanos. El PSOE regional, que no anda muy fino en sus intervenciones sobre este tema, ha señalado que la propuesta se presentó “(…) en mitad de un puente, intentando que nadie se entere del verdadero calado de las decisiones que toma”. Si tenemos en cuenta que la propuesta se presentó el miércoles 31 de octubre y que ese día para la portavoz socialista nos encontrábamos “en mitad de un puente”, cabe deducir que el PSOE se encontraba de fiesta desde el lunes. Eso es un puente y lo demás son tonterías. Por lo declarado parece que la propuesta les pilla de nuevas cuando en la región y fuera de ella no se habla de otra cosa y se ensalza la decisión valiente de Cospedal en un momento muy complicado para las arcas regionales y que hace que haya que tomar decisiones como esta que supondrán un ahorro de alrededor de un millón de euros anuales.

Por no hablar de que de ninguna manera se coarta o se restringe la labor de la oposición ya que es un sistema adoptado por muchos parlamentos y que incluso nuestro parlamento regional se regía por este mismo sistema hasta 1997, por cierto siendo presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha D. José María Barreda. La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha defendido que la retirada de los sueldos a los diputados es «un ejercicio de responsabilidad» con los ciudadanos de la comunidad, a los que se ha pedido un esfuerzo mayor que a los del resto de España para sanear las cuentas públicas. Y se les ha pedido un esfuerzo mayor no por capricho, sino por el lamentable estado en que el PSOE dejó a la región. Quizá ya no nos acordamos que cuando el actual gobierno tomó posesión Castilla-La Mancha era la comunidad con más déficit de toda España y con más de 10.000 millones de euros de deuda. Cospedal ha explicado que esta reforma permitirá que todo aquel que se quiera dedicar a la política lo pueda hacer y al mismo tiempo desarrollar una actividad privada, ya sea «médico, fontanero, ama de casa o profesor». Por lo tanto de sorpresa nada, la medida estaba anunciada y era conocida. Lo que si es sorprendente es escuchar a los que han sido responsables últimos de que Castilla-La Mancha haya estado al borde de la quiebra, reclamar no se sabe qué pretendido derecho a cobrar un sueldo público. O lo que es mucho más grave, reclamar el cobro de un plus vitalicio por el hecho de haber sido cargo público, cuestión sobre la que ya escribí la semana pasada y que los dirigentes socialistas se empeñan en actualizar cada vez que nos hacen saber que el número de recurrentes prestos a seguir cobrando la generosa dádiva aumenta exponencialmente.

 

 

 

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Written by Miguel Angel Rodríguez
He sido muchas cosas, ahora solo un ciudadano de a pie que expresa su opinión sobre los asuntos de su interés, que son variados. Si no os gusta lo que leéis podéis seguir circulando. Sin acritud. Per aspera ad astra.